Tanto para el mantenimiento en general, como para la reparación de una
avería en particular, los centros oficiales de reparación de Toyota se
rigen por la misma máxima: la perfección y la disciplina. Muy acorde con
la mentalidad japonesa, estos denominadores comunes se exportan a cada
país donde Toyota tiene presencia. España no es una excepción. Te
mostramos como funcionan.
Recepción Activa: comunicación directa entre cliente y taller
Para Toyota, la comunicación con el cliente es esencial. Así, en el
momento de diagnosticar una avería, la marca se asegura que no se pierda
información alguna. Este
diálogo de tú a tú con el usuario se realiza a través de una figura: la del
Asesor de Servicio. Éste se encarga de
rellenar un formulario junto al dueño del vehículo
en el que se verifican varios aspectos, desde el estado de todos los
elementos del vehículo como de los niveles del mismo (aceite, líquido de
frenos, refigerante…). De esta manera, el usuario participa de forma
activa en la verificación de su
automóvil.
Una vez se rellena este formulario, este se
clasifica en un casillero dividido en secciones. Cada una va asociada a un color y responde a diferentes necesidades de reparación: el
blanco para el
mantenimiento general, el
verde para
clientes que van a ser atendidos en la misma instalación, el
amarillo para
trabajos relacionados con la carrocería y el
rojo para
averías y trabajos de garantía.
Tras esta primera toma de contacto, el Asesor de Servicio valora si es necesaria la
intervención del Asesor Técnico. Este experto, que cuenta con un
alto conocimiento del producto y las
herramientas de diagnosis de Toyota, trabajará junto al cliente para diagnosticar, sin margen de error, alguno el problema que tiene el coche.
Este proceso es bautizado por Toyota como ‘
Fix it Right’, que se traduce al castellano como ‘Reparar Bien’ y su objetivo no es otro que
detectar las causas exactas de la avería para la posterior reparación realizándose incluso, si el caso lo demanda, una
prueba dinámica junto al conductor. Posteriormente, el Asesor Técnico se servirá de la
tecnología para diagnosticar rigurosamente la avería mediante la
herramienta TD3
firmada por la marca, que graba los datos obtenidos durante la prueba
dinámica y se vuelcan a un ordenador para que el mecánico tenga acceso a
toda la información en el momento de la reparación.
Toyota Express: revisión en una hora
No siempre la visita al taller está motivada por una avería concreta, también son necesarias las
revisiones periódicas de mantenimiento que estipula el fabricante. En el caso de Toyota, estas distan de ser una tarea tediosa, ya que
el tiempo que se le resta al cliente es únicamente de una hora. Un tiempo récord que se consigue gracias a un procedimiento exclusivo de los
concesionarios oficiales de la marca cuya clave es el
trabajo simultáneo y coordinado entre dos técnicos.
Cada experto cuenta con un
guión operativo estándar, pero adaptable a cada tipo de vehículo y revisión. Ambos trabajan a cada lado del vehículo y cuentan con un
carro especialmente diseñado para cada tarea.
En ello se guardan todas las herramientas, útiles y productos
necesarios para la tarea de mantenimiento. Hasta la disposición de los
elementos en dichos carros está orientado a maximizar el tiempo, que se
ordenan según las demandas que dicta el guión estipulado. Además, uno de
ellos incorpora un
sistema neumático que permite realizar automáticamente en
cambio del líquido de frenos mientras el operario sigue trabajando en otros puntos del vehículo. Asimismo, ambos técnicos cuentan con un
tercer carro que realiza simultánea y automáticamente el proceso de
cambio del refrigerante.
Logística de recambios
Just in time o justo a tiempo, es el imperativo que se auto impone Toyota en lo que a la
gestión de los recambios se refiere. El fin último es satisfacer al cliente y no hacerle sufrir demoras innecesarias.
Heijunka o previsión es el primero de los mandamientos de la marca en este menester y
se basa en la planificación. Cada jornada, los concesionarios planifican el día anterior
las piezas necesarias para cada intervención, así se evita que los técnicos estén ociosos en el taller. El segundo de los mandamientos se rige por otro término nipón:
jidouka, que se refiere al
control de imprevistos.
Los imponderables no fallan en la vida diaria y menos en un taller,
pero si se pone especial atención, siempre se puede identificar
cualquier anormalidad y así controlar de forma efectiva los errores.
Las
piezas de recambio se distribuyen en las estanterías en función de las existencias,
si hay stock estas tendrán que ir fuera de las mismas y si hay falta de
stock las estanterías se verán vacías. Así, con un rápido vistazo, se
puede determinar qué es necesario solicitar. De igual manera, los
pedidos se clasifican en urgentes, los cuales se entregan la misma noche del día en el que se ha pedido, o
de reposición, que llegan la siguiente noche al día en el que se han demandado.
Dos términos rigen la política de inventario de recambios en los talleres oficiales de Toyota. El primero es el
MAX-MAX, que establece que
siempre hay que tener una cantidad máxima de unidades
por lo que, si se utiliza la mitad, se debe realizar de forma inmediata
un pedido para mantener esa cantidad máxima. El otro término es el ‘
Sell One, Buy One’, que se traduce como ‘
Vendo una, compro otra’ y significa que cada vez que un taller utiliza una pieza, se debe realizar un pedido para reponerla.
Los
pedidos se realizan primero a los
tres almacenes más cercanos, uno de ellos se encuentra en
España en
San Agustín de Guadalix (Madrid) y los otros dos en
Oporto (Portugal) y
Le Pouzin(Francia) . Hay que señalar que en 2010 el
97 por ciento de las piezas solicitadas estaban
disponibles en alguno de estos centros
y que se entregaron a los centros de servicio dentro del tiempo
prometido al cliente. En caso de que la pieza no se encuentre en los
mencionados depósitos, se solicitará a la
central europea que se ubica en
Diese (Bélgica) y, en el improbable que no esté disponible en la misma, se pedirá al
centro de suministro de Japón.